Web Analytics
Español

Tranquilos! Hay moros en la costa..

Marruecom / Por: Abdelhamid Beyuki / Escritor y especialista en las relaciones hispano-marroquíes

Marruecos ha sido siempre objeto de interés para España y sus ciudadanos. Desde la era decimonónica hasta la actualidad, este vecino meridional ha estado muy presente no ya a nivel de la política exterior, sino en los asuntos internos de las instituciones políticas y los movimientos sociales. Desde entonces corrió mucha tinta en torno al impacto que Marruecos tenía en el vecino del norte dando lugar a numerosas publicaciones en torno a este pasado marcado por efímeros hechos históricos, que dejan bien claro cómo la orilla sur del mediterráneo se convierte a menudo en el epicentro del debate político de las cortes españolas y como las contiendas bélicas de España en Rif eran capaces de movilizar a la totalidad de la sociedad española desde Galicia hasta el archipiélago canario. 

Una de las obras que en Marruecos está teniendo buena acogida es la del Historiador marroquí Yussef Akmir titulada: “Los orígenes políticos y sociales de las relaciones hispano-marroquíes 1875-1912” -Editorial Bab el Hikma 2023-. En ella, el autor trata de probar cómo Marruecos ha sido siempre un asunto interno en la política española, Youssef Akmir enfoca su interés historiográfico sobre último tercio del siglo XIX y principios del XX; la llamada primera época de la Restauración Borbónica, para estudiar el impacto inmediato de “la cuestión de Marruecos” sobre las diferentes fuerzas políticas y los movimientos sociales de la época. Los partidos de turno, el liberal y el conservador, los republicanos, socialistas, anarquistas, el ejército, la Iglesia y el ciudadano de a pie, todos se vieron entonces afectados por lo que entonces sucedía en Marruecos.  Akmir, asentó sus aportaciones sobre abundante documentación a la que ha podido consultar en archivos españoles y marroquíes. Naturalmente, Akmir defiende la tesis en la que se afirma lo mucho que pesaba Marruecos en la política interior de España, pasando por las llamadas guerras de África, la triste y horrible guerra civil Española y la participación de los marroquíes reclutados por el general Franco en la misma. Este interés sigue hasta hoy manifiesto y palpable sobre todo en el debate electoral, así como en el imaginario colectivo español.

Lo que pretendo plantear en este articulo no es precisamente esta presencia continua de Marruecos en la política interior española, sino justo lo contrario; se trata de reflexionar sobre la presencia de España en los asuntos internos de la política marroquí, y el creciente interés de los marroquíes por este país vecino; lo ha sido siempre Francia y sigue siéndolo, pero cada vez se observa mayor interés de los marroquíes por España, y por la política interna de España. Los marroquíes ya no se interesan sólo por el fútbol español y por la liga española, España empieza a ser también un asunto de interés político en Marruecos y una cuestión capaz de generar debate a nivel mediático y de opinión pública, así como un país de referencia.

Hasta hace poco, España no estaba tan presente en el debate político y social en Marruecos, lo ha sido siempre Francia,  sea como objeto de halago y comparación o de crítica. La clase política marroquí, en su mayoría era y es francófona, tanto la gobernante como de la oposición. Entonces  España seguía presente únicamente en los recuerdos nostálgicos de los ciudadanos del norte de Marruecos- ex zona del protectorado español -,así como en el fútbol español, especialmente los equipos del Real Madrid y el FC de Barcelona.

Desde la vuelta de la Democracia y el ingreso de España en la UE, este país empezó a suscitar mucha atracción entre los marroquíes. La presencia de una comunidad marroquí cada vez más numerosa (casi un millón de marroquíes residentes en España), el crecimiento de las relaciones económicas y sobre todo las comerciales; y si a ello sumamos los temas de carácter histórico, nos encontramos con que este conjunto de razones empieza a provocar un cambio en la visión de la clase política marroquí sobre su vecino septentrional. Contra todo pronóstico, entre baches y mini conflictos se fraguaron nuevas relaciones que acaban acaparando cada vez más el interés de los marroquíes por todo lo que sucede en España.

Muchos son los factores que influyeron en ese creciente interés de los marroquíes por España, y por todo lo que sucede en este país vecino. El deterioro de las relaciones franco-marroquíes, la mayor presencia de EEUU en el norte de África, el desarrollo económico que está experimentando el país magrebí y su mayor influencia en África, las transformaciones geopolíticas y geoestratégicas que el equilibrio internacional ha sufrido en esta última década y que acabaron repercutiendo en la región de África occidental; y por último el nuevo enfoque de España en relación con Marruecos, que culmina con el apoyo explícito del gobierno Español al plan marroquí de auto gobierno en el Sahara bajo la soberanía marroquí.

A pesar de algunos conflictos y tensiones que marcaron la década del principio de este siglo, (desde el conflicto del perejil hasta la crisis de Brahim Gali), las relaciones comerciales y de inversión con Marruecos no dejaron de crecer, incluso durante los momentos de crisis, superando en lo comercial a la mismísima Francia. La crisis que suscitó la acogida secreta del líder del Polisario Brahim Gali en un hospital español acabó siendo el principio de una nueva etapa de relaciones entre ambos países marcada por el entendimiento y la estrecha colaboración, sobre todo cuando el gobierno español modificó su posición respecto al Sahara apoyando el plan marroquí de Autonomía bajo soberanía marroquí, y negociado bajo el paraguas de la legalidad internacional en Naciones Unidas.

Por último es de señalar que la importancia de Marruecos para España en materia de seguridad invita a renunciar aquella imagen estereotipada del “moro” considerado históricamente sinónimo de peligro e inseguridad, y expresado en el dicho español “no hay moros en la costa”. Al contrario, hoy en día el mismo “moro” es considerado “guardián” de las costas españolas y el garante de la seguridad para España y la UE. Es más, esta colaboración conlleva la lucha contra la inmigración clandestina y el terrorismo,  se puede señalar que el tema de la seguridad es el eje principal de las relaciones hispano marroquíes, y sobre la cual se construyen los demás elementos que consolidan estas nuevas relaciones entre los dos países vecinos; como es la cooperación económica y en materia de infraestructuras (con el macro proyecto del primer Túnel que unirá Europa con África), llegando a lo deportivo con la presentación de la candidatura conjunta entre España, Portugal y Marruecos. Todo ello es buena prueba de que estas relaciones gozan hoy en día de muy buena salud.

En definitiva, la presencia del “Moro en la costa” debe ser en la actualidad motivo de agrado y tranquilidad, porque se trata de un país amigo y vecino que vela por los intereses comunes que ambas orillas comparten. Y si los políticos no lo estropean, una nueva era se abre en las relaciones hispano-marroquíes y por consiguiente Euro-africanas cuyo pilar será una nueva alianza estratégica entre Marruecos y España.

Si los políticos no lo estropean, estaremos ante una nueva era de las relaciones hispano-marroquíes, y por consiguiente Euro-africanas cuyo pilar será una nueva alianza estratégica entre Marruecos y España.

شاهد أيضاً
إغلاق
زر الذهاب إلى الأعلى