El comité anti-droga se trasladó a la zona norte de Marruecos para investigar la relación entre políticos parlamentarios, responsables de alto cargo, hombres de negocios muy conocidos, propietarios de tierras y el cultivo de hachís.
La investigación se basó sobre informes de asociaciones que denuncian el crecimiento del cultivo de hachís, paso de ocupar propiedades privadas a tierras públicas, Con la complicidad de algunos miembros de alto cargo en las fuerzas de seguridad de la zona.
La investigación concluyo con la involucración de personas importantes y un político parlamentario propietarios de tierras sembradas por hachís, son responsables del cultivo de hachís en tierras públicas. Funcionarios del poder local, miembros de la policía y la gendarmería fueron cómplices en facilitar los procedimientos para usar las tierras públicas.
La gendarmería marroquí uso helicópteros en su búsqueda de avionetas que transportan hachís desde Al Hocima hacia Europa, rastreando la zona mediterránea por una operación donde los traficantes se escaparon en dos helicópteros y un todoterreno 4X4 que la gendarmería no pudo detener.