Web Analytics
أخبار الشمالغير مصنف

La Guerra Fría se instala de nuevo en El Estrecho de Gibraltar

un dibujo que representa el funcionamiento del Escudo Anti-Misil
un dibujo que representa el funcionamiento del Escudo Anti-Misil

La llegada a la base militar de Rota al sur de España de los buques estadounidenses que forman el conocido Escudo antimisiles, convierte al Estrecho de Gibraltar en un nuevo escenario de la Guerra Fría, después de que Rusia haya decidido responder y enviar buques de guerra al Mediterráneo y en concreto frente a las costas de Marruecos y España

La decisión del despliegue del sistema antimisiles en la base de Rota, cuyo uso comparten España y los EE UU, fue decidida en 2011 por el entonces presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y firmada un año después por su rival político, quien le sustituyó en el cargo, Mariano Rajoy

Pentágono pretende enviar a la base aeronaval de Rota un total de cuatro destructores que integran el sistema balístico de defensa tanto del espacio de los países integrados en la OTAN como el propio territorio Estadounidense

De hecho, ya ha llegado el martes pasado a la base naval de Rota el buque lanzamisiles USS Donald Cook, el primero de un escuadrón de cuatro destructores para formar parte del escudo antimisiles de la OTAN. Para el mes de junio de este mismo año, se espera la llegada del segundo destructor US ROSS, y dos más para el año que viene, el US CARNEY y el US PORTER para completar el despliegue definitivo del escudo antimisiles

El escudo antimisiles es un sistema de defensa que consiste en una red de bases navales y terrestres ubicadas en diferentes zonas del planeta. En el año 2000, el presidente estadounidense J.W. Bush propuso este gigantesco proyecto conocido en términos militares como ABM (ANTI-Ballistic Misilles) que ha costado, hasta el momento, más de 70 mil millones de dólares. El proyecto del escudo antimisiles tiene como principal objetivo la detección de misiles balísticos transcontinentales y posteriormente su destrucción antes de alcanzar su objetivo.

Washington ha declarado en más de una ocasión que el escudo antimisiles está dirigido contra las amenazas que representan los países del “eje del mal”, y señala explícitamente a Irán y a Corea del Norte. Rusia y China reciben estas declaraciones con reserva, y aseguran que también están entre los objetivos del programa militar estadounidense, estas inquietudes de los rusos y chinos la avalan la presencia de buques americanos que vigilan y controlan el Norte de China y Siberia.

La llegada de los cuatro destructores estadounidenses a la base de Rota para completar el sistema antimisiles balísticos otorga al Estrecho de Gibraltar una importancia estratégica que vuelve a avivar la Guerra Fría. Rusia por su parte, ha anunciado que, a partir de este año, reforzará su presencia en el oeste del Mediterráneo para afrontar el ambicioso proyecto militar estadounidense.

De hecho, en noviembre de 2013, Rusia envió a las aguas internacionales cercanas al Estrecho de Gibraltar a su crucero portamisiles Pedro el Grande, buque insignia de la Flota rusa del Norte y dotado de misiles nucleares y, cuya misión responde a las disposiciones del Ministerio de Defensa ruso de reanudar la presencia permanente de la Armada rusa en zonas de importancia estratégica como lo es la zona del Mediterráneo.

Pedro el Grande, el mayor buque de guerra ruso y en el mundo, pasó cerca de dos semanas en las aguas del Mar de Alborán frente a las costas de Nador y Alhucemas al norte de Marruecos, y las costas de Almería y Granada al sur de Andalucía.Durante su travesía, la tripulación del buque ruso realizó varias maniobras de defensa antiaérea que consistieron sobre todo en la detección de misiles enemigos. La presencia de Rusia en las aguas del Mediterráneo se reforzará con la llegada a la zona de nuevos buques de guerra en un intento de plantar cara al escudo antimisiles de la OTAN.

اترك تعليقاً

زر الذهاب إلى الأعلى